19 de mayo de 2011

T

Así es que, cuando el té se enfría, solo existe una solución. Has de descender a los habernos donde Hades es mentor e implorar clemencia, arreglartelas al subir, volver a tu origen vitaj y, finalmente, si el angel caído hizo caso omiso a tus suplicas, resignarte al ironicamente maldito microondas.

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kiwi(s)