i'm getting uncomfortable in my own skin
shitty mornings began again and
i don't want to be here watching time die
here or there i've lost the count
so many times i've run and came back
but this time i would like to actually get out
what wuold you say if i told you i'm allready gone.
back to the days that never ends
back to the waiting nights again
i don't need this right now
i don't need blame.

gespenster- gespenster

No estaban solos, se sentía en la habitación como el aire se hacia denso, como les pesaba y los aplastaba. Se notaba lo incomodo, espectante, aterrorizado de los dos. Era evidente que no estaban solos.
Los padres de ella habían salido, ellos habían salido un par de veces, nada serio, pero cuando esa noche se apropicuaron en la alfombra de la sala pudieron sentir la presencia, sentían un calor cercano, sentían la presión en el pecho, el aliento en el cuello, el vació que sigue al horror, sentían algo que los acompañaba.
Se quedaron callados e inmóviles por un momento. Con la piel de gallina hasta la nuca se quedaron. Hicieron un esfuerzo sobrehumano para no abrir los ojos, para no dejar de apretarse las manos, para convencerse de que todo estaba bien, de que no había nada ahí.
Algo se movió en la habitación, era imposible hacer oídos sordos al repentino cambio de atmósfera, imposible ignorarlo, imposible contenerse.
Abrieron los ojos enormes y de un salto se hicieron hacia atrás, sin poder manejar sus extremidades, sin poder controlar el impulso él corrió a la puerta hasta salir de la casa y ella se detuvo cuando ya estaba en la cocina.
Intentando tranquilizarse tomó un vaso con agua. Pensar que casi sintió que lo quería.